Una vez que la iniciativa se convierta en ley, la representante de O’Higgins explicó que los colegios privados deberán adecuar sus ambientes físicos y sociales para recibir a los estudiantes que tengan alguna necesidad educativa especial.
La diputada por la Región de O’Higgins, Natalia Romero, valoró el avance de un proyecto que extiende a los establecimientos educacionales particulares pagados la actual ley de inclusión escolar de los niños, niñas y adolescentes, de manera que dichos colegios también tengan el deber de contar con programas y políticas que permitan el acceso y la permanencia de los estudiantes con necesidades educativas especiales.
Al respecto, la parlamentaria explicó que la actual normativa sobre inclusión escolar sólo exige su aplicación en los establecimientos que reciben aportes estatales, por lo que quedaban excluidos de la norma todos los colegios particulares pagados del país.
“Estoy muy satisfecha de haber aprobado e intervenido en un proyecto de este tipo, cuyo único objetivo es mejorar la calidad de vida de los niños, niñas y adolescentes en situación de discapacidad, quienes muchas veces sufren de discriminación y de segregación en áreas tan relevantes para su vida, como es su derecho a la educación”, manifestó la diputada Romero.
En esa línea, la representante del Distrito 16 detalló que una vez que el proyecto se convierta en ley, los establecimientos particulares pagados deberán adecuar sus ambientes físicos y sociales para facilitar el acceso y la participación de los estudiantes con discapacidad junto al resto de los alumnos, en igualdad de condiciones. Pero además, la diputada Romero explicó que la normativa también prohibirá que dichos colegios puedan expulsar o cancelar la matrícula de algún estudiante por presentar necesidades educativas especiales, como tampoco podrán cobrarles un arancel superior.
“El principal soporte que tienen las familias para mejorar sus condiciones de vida es la educación. Por eso que con esta medida vamos a estar elevando su desarrollo, particularmente de los más de 229 mil menores que viven en nuestra Región de O’Higgins. Con este proyecto, estamos eliminando las barreras de acceso a la educación que arbitrariamente fueron creadas por ciertos establecimientos pagados”, sostuvo la parlamentaria, quien también valoró que los colegios privados, a contar de primero básico, deberán asegurar dos cupos por curso para los estudiantes que presenten algún tipo de discapacidad.