Según el Observatorio del Cáncer, solo el 30% de las pacientes públicas logran
acceder a una reconstrucción, sin embargo, aquellas con cobertura en clínicas
privadas alcanzan el 95%.
La diputada de la Comisión de Mujer y Equidad de Género, Natalia Romero, hizo un
llamado urgente al Ministerio de Salud para aumentar el presupuesto destinado a la
prevención, tratamiento y reconstrucción mamaria, esta última es una prestación
garantizada por ley desde 2010, pero que sigue inaccesible para miles de mujeres en Chile.
La parlamentaria señaló que las campañas de concientización sobre la importancia de
hacerse los exámenes de detección no pueden señirse solo a un mes: «El cáncer de mama
mata a mujeres todo el año. Es un tema que se debe abordar con preocupación, dedicación
y destinando más recursos».
Como ejemplo, la congresista destacó que en el caso del triple negativo, ni el DAC, ni el
GES, ni la Ley Ricarte Soto cubren el tratamiento con pembrolizumab, medicamento que
mejora la supervivencia en este tipo de cáncer. A esto se suma que, en cuanto a la
reconstrucción, en el sistema público hay mujeres que esperan más de 10 años para
acceder a una cirugía reconstructiva tras haber sufrido una mastectomía.
«La reconstrucción mamaria es una prestación que forma parte de las garantías de salud,
pero si no tiene financiamiento adecuado, no es más que una promesa vacía. No es digno
que más mujeres tengan que esperar más de 10 años para un procedimiento que les
permita retomar su vida con normalidad», sostuvo la parlamentaria.
Al respecto, las cifras demuestras la inequidad en el acceso a esta cirugía. Esto, porque
solo el 30% de las pacientes públicas logran acceder a una reconstrucción, sin embargo,
aquellas con cobertura en clínicas privadas alcanzan el 95%.
«Este es un problema de dignidad y equidad. No podemos permitir que el acceso a una
cirugía reconstructiva o a terapias avanzadas dependa del sistema de salud al que las
personas pertenezcan. El Estado debe estar a la altura de las necesidades de estas
mujeres», enfatizó.
Chile no tiene un registro nacional del cáncer
La legisladora agregó otra dramática situación que afecta al país: «En Chile no tenemos un
Registro Nacional del Cáncer, o sea que ni siquiera tenemos las cifras exactas de cuántas
mujeres padecen cáncer de mama, ni de qué tipo es, ni a qué edad son diagnosticadas, ni
mucho menos se sabe cuántas esperan un cirugía reconstructiva, solo se calcula que son
miles por algunos cruces de información que se han realizado».
En este escenario, la parlamentaria enfatizó en la necesidad de implementar el Registro
Nacional del Cáncer, una herramienta mandatada por ley, pero que aún no está en
funcionamiento. Este registro sería clave para tener datos precisos sobre el número de
mujeres que enfrentan el cáncer de mama, lo que permitiría tomar decisiones estratégicas
para asignar recursos y garantizar un acceso más equitativo a las terapias.
«La falta de información actualizada y la ausencia de un registro nacional dificulta aún más
la posibilidad de dar respuestas efectivas y, en cuando hablamos de cáncer, esos datos
pueden hacer la diferencia entre la vida y la muerte», concluyó la diputada.